4.2.3.6.3.- Sátiras
a Góngora y los cultos
AGUJA DE NAVEGAR
CULTOS (1625)
Con la receta para hacer “Soledades” en un día.
Y es probada.
Con la ropería de viejo de anocheceres y amaneceres, y
platería de las facciones para remendar romances desharrapados.

RECETA.
Quien quisiere
ser Góngora en un día, [culto en solo un día]
la jeri –aprenderá- gonza siguiente:
fulgores, arrogar, joven, presiente,
candor, construye, métrica armonía;
poco, mucho,
si, no, purpuracía,
neutralidad, conculca, erige, mente,
pulsa, ostenta, libar, adolescente,
señas traslada, pira, frustra, arpía;
cede, impide,
cisuras, petulante,
palestra, liba, meta, argento, alterna,
si bien, disuelve, émulo canoro.
Use mucho de
líquido y de errante,
su poco de nocturno y de caverna,
anden listos livor, adunco y poro.
Que ya toda Castilla,
con sola esta cartilla,
se abrasa de poetas babilones,
escribiendo sonetos confusiones;
y en la Mancha pastores y gañanes,
atestadas de ajos las barrigas,
hacen ya Soledades [cultedades] como migas.
EJEMPLO HERMAFRODITO:
ROMANCE LATINO
Yace cláusula
de perlas [cláusula= frase, cierre]
Si no rima con clavel, [rima= final de verso,
montón]
dynasta de la belleza, [dynasta= príncipe]
que ya cataclismo fue,
un tugurio de pyropos, [pyropos= joya, carbunclo]
ojeriza de Zalé, [Zalé= isla
de Cabo Verde]
poca porción que secuestra
corusca favila al bien: [corusca favila=
resplandeciente pavesa]
pórtico donde rubrica [rubrica=sonroja]
al múrice Tyrio el ver, [múrice
tirio= molusco de Tiro]
tutelar padrón del alma,
aura genitiva en él.
[Puedes ver
una interpretación del poema en Cervantesvirtual:
http://www.cervantesvirtual.com/obra/la-invencin-de-conceptos-burlescos-en-las-stiras-literarias-de-quevedo-0/]
Y después
que el aprendiz de culto se ha dado por vencido, y dicho que es
la piedra filosofal, o el fénix, o la aurora, o el pelícano,
o la carantamaula, es un romance a la boca de una mujer en toda
su cultedad.
Esto es más
fácil que pedir prestado.
Pues siendo todo
lo que escriben (los cultos tales, no los finos) anocheceres y
amaneceres, con irse a la ropería de los soles, se hallan
auroras hechas, que les vienen como nacidas a cualquier mañanita,
con sus nácares y ostros, leche y grana, y empañado
el día en mantillas de oro, cunas rosadas y
llorares de perlas y de aljófar.
Las flores salvas,
búcaros las yerbas,
que bebe el sol, que chupa, que las lame.
Anocheceres, lutos
de sombras y bayetas de la noche;
cadáver de oro, y tumbas del ocaso
en ataúd de fuego.
Exequias de la luz, y despavilos;
capuces turquesados, y argos de oro;
mundo viudo, güérfanas estrellas;
triforme diosa, carros de silencio;
soñolienta deidad, émula de Febo.
En la platería
de los cultos hay hechos cristales fugitivos para arroyos,
y montes de cristal para las espumas, y campos de
zafir para los mares, y márgenes de esmeraldas
para los praditos. Para las facciones de las mujeres hay gargantas
de plata bruñida, y trenzas de oro para cabellos,
y labios de coral y de rubíes para jetas y hocicos,
y alientos de ámbar (como pomos) para resuellos,
y manos de marfil para garras, pechos de diamantes
para pechos, y estrellas coruscantes para ojos, y infinito
nácar para mejillas; aunque los poetas
hortelanos todo esto lo hacen de verduras, atestando los
labios de claveles, las mejillas de rosas y azucenas,
el aliento de jazmines. Otros poetas
hay charquías,
que todo lo hacen de nieve y de hielo, y están nevando
de día y de noche, y escriben una mujer puerto, que no
se puede pasar sin trineo y sin gabán y bota: manos, frente,
cuello y pecho y brazos, todo es perpetua ventisca y un Moncayo.
Con esto, y con
gastar mucho Calepino [nombre del autor
de un diccionario de varias lenguas muy usado entre los cultos]
sin qué ni para qué, serás culto,
y lo que escribieres oculto, y lo
que hablares lo hablarás a bulto.
Y Dios tenga en el cielo el castellano le perdone. Y Lope de Vega
a los clarísimos nos tenga de su verso,
mientras por
preservar nuestros pegasos
del mal olor de culta jerigonza,
quemamos por pastillas Garcilasos.